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La Plaza del Triunfo

La Plaza del Triunfo es una de las plazas más populares y bonitas de Sevilla así como uno de los espacios públicos más singulares de la ciudad.

Antes se llamó Plaza del Alcázar por su proximidad al mismo. También fue llamada Plaza de los Cantos porque en cierto momento se apilaron en ella los escombros y las piedras que se utilizaron en la construcción de la Catedral. Llamada también Plaza del Hospital del Rey por un hospital con el mismo nombre que se encontraba donde hoy está la Casa de la Provincia.

Finalmente es llamada Plaza del Triunfo en recuerdo del gran terremoto de Lisboa de 1755. Durante un breve periodo de tiempo y aprovechando la coyuntura fue llamada Plaza del Triunfo de la República.

Es interesante estudiar esta zona en periodo islámico: el Alcázar, la Mezquita Mayor (actual Catedral), la Herrería Real (actual Archivo de Indias), la Alcaicería (al norte de la Mezquita Mayor, casi lindando con la misma), y algo más alejados la Casa de la Moneda y las Atarazanas. Todos esos edificios dotados de un recinto defensivo formado por un circuito de murallas con sus correspondientes puertas, es decir una auténtica ciudad palatina. Este espacio era llamado la Alcazaba Interior.

La Plaza del Triunfo y el Terremoto de Lisboa

El terremoto de Lisboa de 1755 es así conocido por ser en esta ciudad donde los daños fueron más destacados.

Tuvo lugar el 1 de Noviembre, día de Todos los Santos, sorprendiendo a miles de personas en plena Misa Mayor.

Su epicentro se localizó en la falla Azores-Gibraltar que cruza una amplia región donde la placa tectónica africana choca contra la euroasiática.

Comenzó el terremoto en Lisboa (ciudad de referencia) a las 9:40 y se manifestaron sus efectos en Andalucía occidental unos 10 ó 15 minutos más tarde.

La sacudida no se percibió como un movimiento continuo, sino que hubo algunos intervalos de quietud. Se registran tres fases en Lisboa y sus correspondientes reflejos en el resto del continente: La primera consistió en rápidas vibraciones muy ligeras que causaron alarma y que duraron alrededor de un minuto. Después de unos 30 segundos vino un movimiento muy violento, el gran temblor, que provocó una destrucción material y humana masiva. Esto duró 2 ó 3 minutos. Después de otra pequeña pausa de menos de un minuto, vino otra fase más duradera de 3 ó 4 minutos, de menor violencia y con tendencia a desaparecer.

Tuvo por tanto el terremoto una duración total de entre 6 y 8 minutos (mayor duración mientras más proximidad al epicentro).

Según los estudios actuales, el terremoto pudo tener en la zona de influencia de su epicentro una magnitud de entre 8 y 9 grados en la escala Richter. Es muy difícil decir con qué magnitud azotó Andalucía occidental.

En relación al maremoto provocado (percibido a ambos lados del Atlántico), baste decir que en el cabo de San Vicente el tsunami pudo haber alcanzado una altura de 15 metros.

Afectó a un área extensísima. Los efectos en tierra firme, en mayor o menor grado, pudieron ser percibidos incluso en Alemania y el maremoto incluso en las Antillas o Brasil.

En cuanto al número de víctimas debemos decir que estamos recogiendo en este artículo los datos del que es el mejor y más profesional estudio realizado hasta la fecha sobre el Terremoto de Lisboa, el realizado por José Manuel Martínez Solares. Pues bien, según sus investigaciones, en Lisboa, y como consecuencia del terremoto, el posterior incendio y el maremoto, murieron unas 12.000 personas (de una población de unas 150.000). También hubo varios miles de víctimas difíciles de cuantificar en el sur de Portugal. En España, a consecuencia del terremoto y especialmente del maremoto (en las costas de Cádiz y Huelva), unas 1.500. En Marruecos es muy difícil saberlo, pero debieron de ser también varios miles.

Las consecuencias del terremoto en la ciudad

Con respecto a los daños en nuestra ciudad (Sevilla se encuentra a unos 371 kilómetros del epicentro): De un posible total de unas 11.000 casas, resultaron destruidas o afectadas muy gravemente entre un 10 y un 20%, y afectadas en mayor o menor medida entre un 60 y un 70%.

De los edificios religiosos y civiles, si bien ninguno de importancia llegó a colapsar, la gran mayoría se verían afectados de alguna forma (se desprendieron pedazos grandes de piedra del techo de la nave principal de la Catedral, diversas secciones del Alcázar resultaron muy afectadas,  y la Giralda quiere la devoción popular que no cayó gracias a la legendaria contribución de las Santas Justa y Rufina, protectoras de la Torre en los terremotos de 1504 (llamado de Carmona), 1655 y 1755). Sí serían serios los daños en las murallas así como en algunas de sus puertas y torres.

Muertos hubo según datos oficiales 9; según la inscripción sobre la lápida frontal del Triunfo, 6, en todo caso muy pocos.

Además de sus implicaciones materiales y económicas tuvo un amplísimo eco social, religioso y filosófico en todo el continente.

Es posible la repetición de un terremoto o maremoto de semejantes características ya que la zona entre Gibraltar y las Islas Azores es de gran intensidad sísmica (en ella contactan y friccionan tres placas tectónicas). De hecho los expertos dicen que movimientos de este calibre suelen repetirse cada mil años. En Sevilla, el último significativo tuvo lugar en la noche de 1969, y otro de menor intensidad en 2007.

¿Qué es un Triunfo en términos artísticos?

En Sevilla, en agradecimiento por los pocos daños personales sufridos en la ciudad y como recuerdo permanente del Terremoto, el Cabildo acordó erigir un monumento en el lugar en el que cuenta la tradición se terminó una misa que en el momento del desastre se celebraba en la Catedral.

Lo que sí parece cierto que en ese lugar se habilitó un altar donde se celebraron las misas del día y por la tarde se ofició un Te Deum (acción de gracias). Este monumento, un Triunfo en términos artísticos, fue sufragado por suscripción popular.

En Andalucía se denomina Triunfo a un monumento laudatorio o conmemorativo sostenido por una columna o pilastra. Este monumento da nombre a la Plaza del Triunfo.

El monumento, obra de José Tomás Zambrano, es finalmente inaugurado en 1756.

La columna y el templete configuran un conjunto barroco realizado en piedra con incrustaciones de mármol.

La imagen de la Virgen (algunos la denominan del Patrocinio) es de escuela italiana y, donada por un devoto, fue posiblemente traída de Florencia.

El conjunto está rodeado de una verja de hierro forjado con cuatro altas farolas del siglo XIX.

Escrito en la lápida frontal del Triunfo:

“ SABADO 1 DE NOVIEMBRE DEL AÑO 1755 A LAS 11 DE LA MAÑANA HUBO GENERAL PAVOROSO TERREMOTO EL QUE SE CREYO ASOLABA A LA CIUDAD Y SEPULTABA A SUS MORADORES A TUINA, PUES SE ESTREMECIERON VIOLENTAMENTE LOS EDIFICIOS CAYENDO ALGUNOS Y PARTE DE LAS IGLESIAS. EN LA PATRIARCAL CON ESPANTOSO HORROR LLOVIERON PIEDRAS DE SUS BOVEDAS CAIERON PILARES DE LO ELEVADO DE SU TORRE, Y SIENDO SIN NUMERO EL CONCURSO NADIE SALIO LASTIMADO.

EN TODA SEVILLA SOLAS SEIS PERSONAS PERECIERON, DEVINIENDO LAS DEMAS SUS VIDAS Y LA CIUDAD SU CONSISTENCIA AL PATROCINIO DE LA QUE ES MADRE DE DIOS Y MISERICORDIA, MARIA STMA., EN CUYO HONOR Y PERPETUO AGRADECIDO MONUMENTO MANDARON LOS ILTMOS. SS. DEAN Y CABILDO ERIGIR ESTE TRIUMPHO EN EL SITIO MISMO QUE SE DIXO LA MISA”.

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